Ingeniero agrícola de formación, cocinero de corazón . Después de mucho tiempo sobreviviendo y no encajar en el sistema decide dar el salto con su familia y apostar por la vida rural formando parte del proyecto cooperativo de La Surera en el pequeño pueblo de Almedíjar. Poco a poco quiere ir tejiendo una red que de fuerza para crear proyectos colectivos en torno a la gastronomía, soberanía alimentaria y agricultura de proximidad.